10 beneficios de la terapia felina para tu salud

La terapia felina es una práctica poco convencional que se utiliza para apoyar las técnicas de la medicina tradicional y que implica la interacción del felino con el paciente. El método se basa en la ayuda del gato para proporcionar el bienestar a la persona. En particular, la terapia felina ayuda a personas con diversas dificultades y discapacidades físicas o mentales durante las actividades terapéuticas.

¿Qué es la terapia felina?

La terapia felina es parte de esas terapias no convencionales asistidas por animales que a menudo apoyan las terapias tradicionales y ayudan al paciente a manejar mejor las emociones y superar los problemas físicos y mentales. En este sentido, los gatos son los candidatos ideales para quienes necesitan un apoyo emocional real. Los gatos tranquilos, los gatos dóciles y su carácter cariñoso pueden realmente brindar una valiosa ayuda para todos aquellos que necesitan encontrar paz y tranquilidad.

La terapia con gatos se usa a menudo para ayudar a las personas a controlar ansiedades y depresiones severas y salir de la soledad. La energía positiva de los gatos ayuda a aumentar el buen humor, te hace más feliz y sereno y, gracias a su carácter dócil, son una mascota perfecta para las personas que necesitan apoyo emocional. La energía de los gatos no solo ayuda a calmar y relajar a quienes interactúan con ellos, sino que también son una fuente de entretenimiento y diversión (gatos energía positiva).

Según los partidarios de esta terapia, jugar con gatos también mejora la actividad cerebral y el estado emocional y psicológico del paciente. Como decíamos, la terapia felina no es más que una terapia asistida con animales, como podría ser con un perro o un caballo, solo que en este caso nuestro amigo de cuatro patas es el gato.

Según un estudio realizado por el Stroke Institute en Minnesota, las personas que viven con gatos tienen un 30% menos de posibilidades de morir de un ataque cardíaco. Y nuevamente, de acuerdo con una investigación realizada en la Universidad de Indiana en Bloomington, donde participaron 7.000 personas, se concluyó que ver vídeos de gatos disminuye significativamente los pensamientos negativos y aumenta la energía. Según otros estudios realizados en Suecia y Finlandia, se demostró que la interacción de los gatos con los niños durante la infancia aumentaría el sistema inmunológico. De hecho, según esta investigación, el ronroneo aumentaría la secreción de endorfinas que fortalecen el sistema inmunológico.

Beneficios de la terapia felina

¿Por qué llega un gato a tu vida? Según el misticismo, un gato entra en la vida de las personas cuando tiene que cumplir una misión y aportar energía positiva. Más allá del significado místico, los felinos son animales muy inteligentes, dulces, cariñosos y también muy independientes. Son excelentes animales de compañía y para quienes sufren de soledad. Además, se dice que el sonido de los gatos (el zumbido que emiten cuando ronronean) tiene un efecto relajante que pone de buen humor. La terapia felina tiene varias ventajas como, por ejemplo, un efecto positivo en la psique del paciente, ayuda a los pacientes con problemas motores. La terapia felina es también un método que se utiliza para apoyar terapias en casos de patologías cerebrales y, asociado a otras terapias, puede ser una ayuda válida para los trastornos emocionales y psicológicos.

Como ya hemos dicho anteriormente, la terapia con gatos puede tener varios beneficios, y ventajas para quienes la practican. Entre estos mencionamos los principales:

1. Mayor nivel de autoestima y confianza en sí mismo
2. Mejora de las relaciones interpersonales y del amor por uno mismo y los demás
3. Aumento de la autoconciencia y el empoderamiento
4. Disminución del estrés, los síntomas de ansiedad y la depresión
5. Calma del sistema cardiovascular
6. Ayuda a la resolución problemas psicomotores
7. Favorecimiento de la comunicación
8. Mejora de la educación emocional del paciente
9. Mejora de los síntomas del estrés postraumático
10. Aumento del bienestar de los niños con autismo

¿Cómo se realiza una terapia felina?

La terapia felina consiste en una técnica asistida con animales que implica la interacción y comunicación entre el gato y el paciente. Por ejemplo, simplemente acariciar a un gato puede ayudar a reducir el estrés, controlar la ansiedad, la depresión y calmar la mente. La terapia felina se practica con profesionales cualificados y se puede practicar de forma individual o en grupo.

La terapia felina encuentra aplicación en pacientes que tienen estados particulares de ansiedad y depresión o que sufren de soledad. Este método también se utiliza para ayudar a personas que padecen esquizofrenia y varios tipos de neurosis. La terapia con gatos también se ha utilizado con niños que tienen problemas de audición o habla y autismo. Según un estudio publicado en Frontiers Of Veterinary Medicine, los gatos contribuyen positivamente con los pacientes pequeños que tienen síntomas leves o moderados de autismo. Los niños mejoran su capacidad para relacionarse con los demás, con el mundo exterior y aumentan su confianza en sí mismos y en los demás.

A menudo, los gatos, así como otros animales, también se utilizan como ayuda para los enfermos en el hospital, para los ancianos en los hospicios y para los enfermos terminales. La terapia felina se basa en la relación que se establece entre el gato y el paciente. El felino en sí no hace nada especial; pero, gracias a su carácter dócil, se deja acariciar y mimar.

La terapia felina es una terapia asistida por animales que no presenta contraindicaciones particulares y que se puede aplicar a todos, niños, adultos y ancianos. Todos los animales que se utilizan en terapias asistidas con animales deben haber sido seleccionados y entrenados y la sesión debe ser conducida por un equipo profesional y cualificado que puede incluir un veterinario, un educador, un trabajador social, un médico. La única contraindicación que podría tener la terapia felina es una posible alergia al pelaje del animal.