El desarrollo personal, también conocido como superación personal, se trata de un proceso en cual una persona intenta adoptar nuevas maneras de afrontarse a su vida y a los problemas que se presentan en ella. Pero, ¿Cómo nos puede ayudar el desarrollo personal?
¿Qué es el desarrollo personal?
El desarrollo personal es un camino individual que cada uno debe emprender para alcanzar el pleno conocimiento de sí mismo y vivir bien y en armonía con su cuerpo y su interioridad. El camino del desarrollo personal sirve para mejorar a sí mismo y la relación con los demás, para superar un momento de crisis, para quien no sabe lo que quiere y se siente abrumado por los acontecimientos. Es una técnica que se aplica tanto al directivo que quiere perfeccionar sus habilidades y trabajar hasta el límite, como al deportista en crisis o al ama de casa que simplemente quiere conocerse mejor. No hay límites, solo posibilidades de crecimiento y mejora.
El desarrollo personal se basa en una serie de técnicas destinadas a expandir la conciencia del sujeto. Las actividades que componen este camino incluyen la mejora de la identidad, la autoconciencia, promover el desarrollo de habilidades personales, mejorar la calidad de vida y hacer realidad los sueños. El desarrollo personal se trabaja con un maestro, un guía, un coach, que ayuda paso a paso en el camino de la superación y el crecimiento personal. Se puede aplicar tanto a nivel personal como dentro de las organizaciones.
Historia del desarrollo personal
La historia del desarrollo personal existe desde hace milenios. De hecho, a pesar de no tener este nombre, en la Grecia clásica ya se dedicaban al cuidado de la persona en su totalidad. El autoconocimiento como base para cualquier otro conocimiento y para el crecimiento personal se remonta al famoso "conócete a ti mismo" socrático. Los filósofos y pensadores se han cuestionado durante mucho tiempo sobre el origen del mundo, del conocimiento, del hombre y cuáles son los propósitos de la vida. Si pensamos en la civilización oriental, en todas las técnicas milenarias que han llegado hasta nuestros días, nos damos cuenta de que la historia del desarrollo personal es muy antigua, no conoce fronteras geográficas, sino que simplemente forma parte de la naturaleza humana. El hombre tiende naturalmente a cuestionarse a sí mismo sobre el mundo, a superarse, a intentar hacer más, pero no son muchos los que tienen conciencia de esto.
Desde el punto de vista psicoanalítico, los primeros en dedicarse a estos estudios son dos psicoanalistas: Carl Gustav Jung (1921) y Alfred Adler (1930). El psiquiatra suizo Jung suele ser retomado en las teorías modernas del desarrollo personal. Por ejemplo, refiriéndose a los arquetipos, el inconsciente colectivo, la sincronicidad, los sueños y la teoría de la "individuación". La "individuación" es el proceso que tiene como objetivo el desarrollo de la personalidad del individuo, pasando por la armonización de lo consciente y lo inconsciente.
Adler fue el fundador de la psicología individual y del concepto de "estilo de vida", cada uno tiene una visión personal de la vida, forma una imagen personal de sí mismo y se relaciona con los problemas de una manera diferente.
Otro método importante para el desarrollo personal es el del farmacólogo y psicoterapeuta francés Émile Coué (1857-1926). Coué escribió el texto “Maîtrise de soi-même par l'autosuggestion consciente”. Este método se basa en la repetición diaria (tres veces al día veinte veces) de la frase: “Tous les jours, à tous points de vue, je vais de mieux en mieux”.
Otro aporte importante es el de la psicología humanista de Abraham Maslow y Carl Rogers. Abraham Maslow estudió las necesidades del hombre y formuló una pirámide, la dichosa "pirámide de necesidades". El punto más alto de esta pirámide es la realización personal. Su teoría puede expresarse claramente con la frase: What a man can be, he must be. This need we may call self-actualization.
Siguiendo con lo que respecta al pensamiento positivo, debemos recordar el texto de Norman Vincent Peale: The power of Positive Thinking, El poder del pensamiento positivo, que enseña cómo transformar energías negativas en energías positivas.
¿Cuál es la importancia del desarrollo personal?
El desarrollo personal es un camino que nos acompaña a lo largo de nuestra vida. Es nuestro objetivo. Queremos alcanzar un nivel de madurez que nos haga sentir completos. Cada una de nuestras elecciones define nuestro carácter y el tipo de persona que somos.
El camino del desarrollo personal es muy largo, se compone de muchas encrucijadas y nos toca a nosotros entender cómo comportarnos frente a ellas, qué camino tomar. El desarrollo personal nos ayuda en esta misión haciéndonos comprender cómo permanecer en el camino principal y cómo mantener una buena comunicación con nosotros mismos y con los demás.
Gracias al coaching, y gracias también a los recursos de autoayuda, podemos trabajar para lograr nuestra madurez intelectual y de conciencia, podemos entender cuáles son nuestros objetivos, identificarlos y estudiar la mejor estrategia para conseguirlos. En la base de nuestra realización está nuestra felicidad.
¿Para qué sirve el desarrollo personal?
El desarrollo personal sirve para vivir mejor y avanzar con un nivel de conciencia que nos permite sentirnos bien con nosotros mismos, con los demás y lograr alcanzar nuestras metas de manera clara y armoniosa. Entre las principales funciones del desarrollo personal, encontramos:
Es el punto de partida del desarrollo personal. Solo conociéndonos en profundidad, con nuestros puntos fuertes y nuestros puntos débiles, podremos crecer y alcanzar nuestras metas.
Establecemos metas específicas y trabajamos de manera eficiente para lograrlas.
La motivación es nuestro motor. Si somos conscientes de nosotros mismos y de nuestros objetivos, estaremos más motivados en nuestras acciones.
Encontrar el equilibrio entre el trabajo y la vida personal es fundamental para nosotros mismos y para nuestra relación con los demás.
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Mejorar la vida cotidiana
Gracias al autoconocimiento, a las metas y a ser capaces de dar el espacio adecuado al trabajo y la vida privada, la vida cotidiana mejora visiblemente y desde todos los puntos de vista.
Actividades de desarrollo personal
Hay muchísimas actividades de desarrollo personal que podemos hacer. Algunas de ellas ya forman parte de nuestro día a día. Basta con tener un mayor grado de conciencia cuando las hacemos. Estas actividades nos ayudan a sentirnos mejor y a trabajar las distintas áreas de la comunicación: la relación con nosotros mismos, la relación con los demás, la formación personal. Se utilizan para desarrollar una mayor conciencia y aprender a dedicar tiempo a nosotros mismos, a nuestras pasiones y a nuestro crecimiento como personas.
Es muy importante concentrarse en lo que deseamos, y para ello es necesario partir de un estado de tranquilidad, y desde allí se puede proceder a trabajar hacia la realización de este proyecto. No olvidemos que todo lo que hacemos afecta a nuestra forma de ser y nuestra formación. Y, aunque no nos demos cuenta, estamos contribuyendo a nuestro aprendizaje continuo. Veamos una lista de actividades que se pueden realizar para trabajar en el desarrollo personal.
1. Leer
Sin lugar a dudas, la lectura es una práctica más que recomendada para quienes quieren cultivar su interioridad. No importa qué tipo de libro se lea, porque de todas formas estamos haciendo un trabajo mental de abstracción. Obviamente, dependiendo del contenido del texto, existe el beneficio adicional de adquirir ciertos conocimientos. La lectura estimula el razonamiento y nos abre infinitos caminos, poniéndonos en contacto con infinitos puntos de vista.
2. Permanecer al aire libre
Los espacios abiertos son buenos para la mente y para el cuerpo.
3. Ver una película
Ya sea ir al cine o ver una película en casa. Lo que importa es que el séptimo arte representa una gran oportunidad de crecimiento personal. Es una manera de entrar en contacto con emociones, personajes y lugares, a través de la narración propuesta por el director.
4. Hacer ejercicio
Es sabida la profunda conexión entre cuerpo y mente. Moverse y hacer deporte es fundamental para nuestro bienestar psicofísico. Gracias al movimiento, se pone en marcha la producción de varias hormonas que mantienen nuestro estado de ánimo alto y que nos estimulan a la productividad (endorfina, oxitocina, dopamina, serotonina).
5. Estudiar una lengua extranjera
Es una manera de hacer funcionar la mente y de aprender nuevas formas de razonar e interpretar el mundo a partir del lenguaje.
6. Viajar
Viajar es expandir nuestros horizontes, es ponernos a prueba, conocer diferentes mundos, diferentes usos y diferentes tradiciones. Es una fuente de gran evolución personal.
7. Aprender actividades manuales
El uso de las manos y la imaginación es una valiosa ayuda para el desarrollo de la creatividad. También es útil para dejar de usar la mente y dejar que los pensamientos fluyan.
8. Hacer yoga y meditar
Todas las disciplinas que involucran la autoconciencia y la meditación, que trabajan en la respiración, tienen enormes beneficios psicofísicos para el individuo.
9. Ayudar a los demás
No importa si se hace de forma semanal o mensual, de forma oficial o con un vecino. Cada uno es libre de elegir su propia forma de ser útil a los demás y de hacer gestos de amor con un fin en sí mismos. Esta actividad es fundamental porque nos ayuda a salir de nosotros mismos y de nuestros problemas, nos abre al mundo y nos muestra que hay muchas situaciones en las que un pequeño gesto puede valer mucho, y nos llena inmensamente.
10. Autoayuda psicológica
Se puede realizar de forma independiente (siguiendo cursos o leyendo libros) o con la ayuda de un profesional de enriquecimiento personal.
Ejemplos de desarrollo personal
Podemos hacer un ejemplo de cómo se lleva a cabo el desarrollo personal. Un plan de desarrollo personal se basa en un propósito, una visión a largo plazo, una visión a medio plazo y una visión a corto plazo. Es necesario definir la misión del plan de desarrollo personal y distinguir entre Misión encomendada y Misión asumida. Una vez estén definidos estos puntos, se pueden establecer los proyectos de acción, que se basan en un objetivo, una estrategia y una meta.
Áreas de aplicación del desarrollo personal
Veamos en detalle cuáles son las 5 áreas de aplicación del desarrollo personal.
Aprende a conocerte a ti mismo y a entender cuál es tu propósito. Es muy importante ponerse en contacto con nuestro mundo interior y comprender lo que queremos. Pero no solo esto. Para que el proceso de autoaprendizaje sea realmente efectivo, es fundamental comprender cuáles son nuestras fortalezas, pasiones e intereses. Tenemos que descubrir qué no nos gusta y en qué no somos tan buenos. Solo gracias al conocimiento profundo de nuestra persona podemos realmente trabajar en nuestro desarrollo personal.
Las emociones son el centro de nuestra existencia. No pasa un segundo sin ser atravesado por al menos una de ellas. Por eso es importante conocerlas, reconocerlas y gestionarlas. De esta manera podemos desarrollar el control sobre nuestras relaciones, mejorar la forma en que nos comunicamos y estamos con los demás. No hay que dejarse abrumar por la ira, la inseguridad, el miedo.
Cómo nos vemos a nosotros mismos, qué percepción tenemos de nosotros mismos. Nuestro mundo interior es nuestra autoestima, y está formado por nuestras relaciones y nuestra interioridad. El hecho de que nuestra autoestima funcione correctamente significa que somos personas libres y que no nos dejamos influenciar por el mundo exterior. Tenemos claras nuestras necesidades, quiénes somos y nuestros objetivos.
El hombre es un animal social y las relaciones son un espejo de nuestra interioridad. Gracias a nuestra forma de vivir las relaciones con los demás, podemos entender más sobre nosotros mismos. Por ejemplo, si tenemos la necesidad urgente de estar con los demás y si no sabemos estar solos, así como si intentamos escapar de las relaciones con las otras personas, estos comportamientos pueden ser la señal de alguna situación no resuelta a nivel personal con nosotros mismos.
La forma en que nos comunicamos define la forma en que nos relacionamos con los demás y pensamos. Si aprendemos a comunicarnos de forma empática y asertiva podremos cosechar muchos beneficios a nivel personal, las relaciones serán armoniosas y nuestra calidad de vida se beneficiará enormemente (lo que no sucede si nuestra comunicación es nerviosa y agresiva).
¿Cómo hacer un plan de desarrollo personal?
Veamos ahora cómo hacer un plan de desarrollo personal:
- Definir la meta y los propósitos del plan de desarrollo personal.
- Desglosar los pasos. Uno a uno, definimos los pasos a seguir para lograr el objetivo. Una vez identificados, separamos cuáles son los pasos que podemos gestionar de forma independiente, porque dependen solo de nosotros
- Recursos. ¿Cuáles son los recursos que tenemos disponibles? ¿Cuáles podríamos usar? ¿Cuáles son los más útiles? Al responder a estas preguntas, podemos comprender lo que tenemos disponible, fortalecerlo y en qué debemos invertir.
- Fijemos metas a largo plazo, medio plazo y corto plazo.
- Colaboradores. ¿Quién nos puede ayudar con la implementación de nuestro plan de desarrollo? Aprender a delegar y confiar en los demás es fundamental para el éxito de nuestro proyecto.
- Compartir. No hay éxito que no se comparta. Compartamos nuestras dudas, inquietudes y deseos con personas de confianza. Será una forma de sentir a los seres queridos más cercanos, contar con su apoyo y al mismo tiempo visualizar con mayor claridad nuestro camino.
Desarrollo personal en el trabajo
¿En qué consiste el desarrollo personal en el trabajo? El objetivo es transformar un simple grupo de personas en un equipo de alto humanismo. Para ello es fundamental un trabajo previo a nivel individual, en el que cada uno de los participantes aprenda a conocerse a sí mismo, realizando un trabajo de desarrollo personal. Los individuos deberán seguir el camino descrito anteriormente, trabajar en un conocimiento profundo de sí mismos, enfocarse en sus deseos, sus proyectos, cuáles son sus debilidades y cuáles son las fortalezas, qué les gustaría para sí mismos, cómo se relacionan con los demás. Llegados a este punto, cuando tienen clara su individualidad y se han formulado una idea precisa de sí mismos, pueden empezar a cuestionar su forma de interpretar el entorno laboral, cómo se relacionan con los compañeros, si piden ayuda, cómo piden ayuda, si están predispuestos a ayudar, a escuchar, a compartir éxitos y nuevos aprendizajes.
Si bien en muchas empresas todavía existe una reticencia hacia este tipo de actividad, es muy importante que las organizaciones dediquen espacios de desarrollo personal en el trabajo. Gracias a esta práctica todo el sistema funcionará mejor, porque los trabajadores sentirán un mayor nivel de motivación y todos ocuparán el lugar que más les convenga. El aprendizaje continuo es fundamental tanto para el individuo como para la sociedad, y el contexto laboral es una representación del modelo social a escala.
Desarrollo personal y liderazgo
Para proceder con un plan de desarrollo personal y liderazgo, tanto a nivel individual como a nivel de empresa, el primer paso a dar es hacer un análisis de la situación actual. Gracias a una evaluación previa, se puede elaborar un plan de desarrollo funcional y eficaz. Comenzamos por identificar el proyecto final, los pasos individuales que lo componen y los recursos disponibles, para luego pasar a la planificación de objetivos a largo, medio y corto plazo, y la red de ayuda y colaboradores en la que podemos confiar.
Para que el trabajo de desarrollo personal sea efectivo, es necesario verificar constantemente el avance del plan y aprender a rectificar si es necesario. Es normal que haya obstáculos. Pero son parte del juego y tendrás que aprender a saltarlos, sortearlos y aceptarlos como parte del camino de aprendizaje. La clave para alcanzar los objetivos es mantener alto el nivel de automotivación, que es el verdadero motor de realización personal y grupal.
Escrito por
Wellme.es
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Bibliografía del artículo
- Abraham Maslow, "A theory of human motivation", Psychological Review, 50 (1943), pp. 370-396.
- Carl Rogers, Le développement de la personne (On becoming a Person: A Therapist 's View of Psychotherapy, 1961), Dunod, 1966, 284 p.
- Émile Coué, La maîtrise de soi-même par l'autosuggestion consciente, FV Éditions, 1932, ISBN 2366685750 y 9782366685756 (texto en línea).
- Norman Vincent Peale, La puissance de la pensée positive, trad., Marabout, 2008, 246 p.
