Conoce las principales técnicas de la PNL

En el año 1970, un par de científicos conocidos como John Grinder y Richard Bandler, habría creado un sistema que permitiría analizar las diferencias individuales de una persona. Este sistema, conocido como programación neurolingüística (PNL), sería usado para comprender por qué algunos individuos son capaces de lograr sus objetivos y otros no, pese a no tener grandes diferencias.

La PNL es el estudio del comportamiento, específicamente de aquellos factores que influyen en el logro de objetivos. Dicho estudio, hace énfasis en el análisis de elementos presentes en el leguaje, la experiencia y los agentes neurológicos de un individuo, considerándolos como puntos determinantes en el cumplimiento de las metas, los cuales pueden ser moldeados para ello. Ya con algo de contexto en nuestra lectura, conoceremos a continuación las principales técnicas de la PNL, entendiendo principalmente su teoría y aplicación.

1. Rapport

El Rapport es un fenómeno aplicado típicamente por los psicólogos, una técnica en donde dos o más personas logran crear y mantener un intercambio de ideas de manera fluida y plena. El propósito, en este escenario, es que el paciente pueda sentirse en la libertad de expresar lo que siente, permitiéndole al psicólogo encontrar toda la información que necesita en la sesión.

En la PNL, el Rapport es uno de los elementos más importantes, al convertirse en el recurso necesario para crear sintonía y sinergia con otras personas en una situación determinada (laboral, de negociación, etc.). Esto nos permitirá afianzar relaciones con quien sea necesario, logrando una cooperación asertiva, donde ambas partes puedan encontrar satisfacción y buena comunicación.

2. Anclaje

El anclaje es una técnica que se usa para mitigar cualquier emoción asociada al malestar. Lo usaremos como una manera de controlar estas emociones y adaptarnos de manera eficaz ante cada situación. Esta técnica proviene del enfoque del condicionamiento clásico, propio de la psicología conductista, caracterizada por su exhaustivo estudio sobre el aprendizaje animal y humano.

Cuando usamos el anclaje, asociamos un estímulo (mayormente un recuerdo o pensamiento positivo) a una emoción. Ante una situación de malestar, el uso de este estímulo nos permitirá traer a nuestra sensación una emoción positiva, deshaciéndonos del malestar provocado por el entorno. Es, en una forma más coloquial, lo que las personas suelen definir como “ir a un lugar feliz”.

3. Asociación y disociación

No es lo mismo ver el problema desde adentro que desde afuera. Una referencia que nos permitirá entender con mayor facilidad el concepto de esta técnica. La asociación es, en esencia, la manera en la que una situación problema o pensamiento nos transmite sentimientos negativos y nos compromete. Cuando sentimos miedo a una situación en específico, vivimos el pánico y nuestro cuerpo lo siente. La disociación, por su parte, se presenta cuando somos capaces de analizar la situación o el pensamiento que nos afecta desde lo externo.

La idea de esta técnica es pasar de la asociación y la disociación, de modo que seamos capaces de analizar el entorno desde una óptica más controlada y objetiva, permitiéndonos resultados más asertivos. 

4. Fisiología

El dominio no solo debe ser de nuestra mente, sino también de nuestro cuerpo, y eso es lo que plantea esta técnica. Elementos como la respiración, la postura que adoptamos ya sea sentados o de pie, etc. Si logramos tener un control consiente de nuestro cuerpo, lograremos entender qué estamos transmitiendo a nuestro entorno. Esto nos ayudará a comunicar de manera más efectiva nuestras ideas, y de mejorar nuestras emociones.

5. Referencia interna o externa

Cuando hablamos de referencias, nos referimos a los esquemas mentales que una persona presenta. Estas referencias son patrones que, de manera inconsciente, se usan para organizar las ideas y presentarlas en la toma de una decisión. Existen dos tipos de diferencias: internas y externas.

• Referencia interna: Son esquemas que las personas han elaborado por su cuenta, los cuales dependen de sus propios pensamientos. Quienes usan referencias internas, recurren a su propio juicio para una decisión. Este tipo de referencia es común en personas que tienen un dominio importante de un tema, por ejemplo, una carrera universitaria que han cursado.
• Referencia externa: Contrario a la interna, las referencias externas se basan en el entorno, mayormente, en la opinión que el resto de las personas platean ante una determinada situación. Estas referencias son usadas por personas que dan mayor importancia a la opinión de otras sobre un tema. Típicamente, son usadas por personas inexpertas en un área de conocimiento o con algunas inseguridades.

Cuando somos conscientes del uso de este tipo de referencias, podemos comunicarnos de una manera más efectiva con otros, ya que entenderemos de dónde parte la toma de sus decisiones respectivamente.

6. Visual, auditivo o kinestésico

La toma de decisiones puede ser modificada a través de diferentes canales de transferencia de información. Estos canales cuentan con tres principales códigos:

• Visuales: Basado en imágenes y videos.
• Auditivos: Basado en los sonidos y en las ideas expuestas.
• Kinestésicos: Son códigos expresados a través del lenguaje corporal. Seguramente hemos observado alguna vez a una persona que use muchos gestos con sus manos mientras explica una idea. Esto es una persona kinestésica.

Cuando identificamos cuál de estos canales emplea una persona para tomar sus decisiones, podemos hacer uso del mismo para incidir en su toma de decisión. Por ejemplo, muchas personas hacen uso del “ver para creer” (Canal visual) para poder suscribir una idea.

7. Órdenes encubiertas

Podemos incidir en las decisiones de las personas a través de la entonación en nuestro discurso. Esto nos permitirá encubrir órdenes de manera discreta mientras expresamos nuestras ideas. Para lograrlo, esta técnica nos propone que debemos entonar de manera descendente las preguntas planteadas, es decir, cerrando en un tono grave.

Sucede que, de manera típica, las preguntas suelen expresarse de manera aguda, es decir, con una entonación ascendente. Si invertimos esto, podemos lograr un efecto persuasivo al momento de realizar preguntas. Finalmente, estas han sido las principales técnicas de la PNL. Podemos emplearlas tanto de manera conjunta como por separado. Todo dependerá de la situación en la que nos encontremos específicamente.