¿Cómo afrontar una disfunción sexual? 7 Métodos para superar la aversión al sexo

¿Qué hacer ante una disfunción sexual? ¿Cómo podemos identificar los síntomas? Descubre cómo lidiar con esta patología y qué hacer ante esta situación.

22 SEP 2021 · Última modificación: 7 FEB 2022 · Lectura: min.
¿Cómo tratar las disfunciones sexuales?

El sexo en una relación de pareja es pilar fundamental para el buen funcionamiento de la misma y puede ser una gran oportunidad para conectar y compartir distintas sensaciones y estímulos con tu pareja. Sin embargo, para algunas personas puede resultar un completo caos, debido a que pueden existir problemas de disfunción sexual.

Estos problemas pueden ser ocasionados por factores psicológicos, orgánicos que suelen afectar al momento de intimar en pareja. Es fundamental contar con la ayuda de un profesional que conozca el problema y las técnicas y métodos que pueden ayudarte a mantener una vida sexual más gratificante. Vamos a definir qué es y cuáles son los síntomas de una disfunción sexual.

¿Qué es una disfunción sexual?

Las disfunciones sexuales se pueden clasificar por distintos tipos y clases, sin embargo, todas tienen un común denominador, y es que dificultan el llevar a cabo la actividad sexual de manera satisfactoria, creando así molestia y frustración tanto en la pareja como en el individuo que la padece. Es decir, ya sea falta de interés sexual, el no ser capaz de sentir placer, la incapacidad para  alcanzar el orgasmo o incluso un fallo en la respuesta fisiológica que impide la interacción sexual pueden llegar a ser una disfunción sexual.

Síntomas de una disfunción sexual

Como hemos comentado, la disfunción sexual ocurre cuando tienes un problema que te impide disfrutar de la actividad sexual y puede darse tanto en hombres como en mujeres de todas las edades, si bien las probabilidades aumentan con la edad.

La disfunción sexual no es un mero problema puntual, sino una alteración que sucede de manera regular o intensa y que afecta mucho a la persona que la padece.

Generalmente, cuando hablamos de disfunciones o trastornos sexuales, éstos se refieren a dificultades significativas que afectan al deseo o al interés en el sexo, a la excitación fisiológica de tu cuerpo, al orgasmo o clímax o al dolor durante las relaciones sexuales. Entre los más comunes y conocidos podemos destacar los siguientes:

  1. Disfunción eréctil: El principal síntoma de disfunción es que no se tiene la capacidad para mantener o incluso conseguir la rigidez en la erección durante el tiempo suficiente para así lograr practicar relaciones sexuales de manera gratificante.
  2. Eyaculación precoz: El principal indicativo de esta disfunción sexual es la incapacidad de retrasar la eyaculación el tiempo suficiente para que ambos miembros de la pareja disfruten plenamente de la relación sexual. A menudo, lo que ocurre es que el hombre eyacula en cuanto recibe la más mínima estimulación y mucho antes de lo que desea.
  3. Trastornos orgásmicos masculinos: A diferencia de la eyaculación precoz, puede existir un trastorno por ausencia o retraso persistente y recurrente del orgasmo. Además, habría que mencionar otros trastornos de la eyaculación (que no del orgasmo) como la aneyaculación, la cual hace referencia a la alteración de la fase de emisión o expulsión.
  4. Deseo sexual hipoactivo femenino: Disminución o ausencia total de manera continua hacia las actividades sexuales.
  5. Trastorno por aversión al sexo: Fobia extrema y evitación recurrente de todo tipo de contacto sexual genital. La alteración provoca malestar acusado y problemas de evitación, miedo y ansiedad hacia las relaciones íntimas.
  6. Trastorno de excitación sexual en la mujer: Esta disfunción trae como síntoma el no tener de manera recurrente la respuesta de lubricación adecuada en la fase de excitación, hasta el término del coito. Provocando así malestar o dificultad en el acto sexual.

Causas de una disfunción sexual

Las causas que pueden provocar una disfunción sexual tanto en hombres como en mujeres son amplias, pero existen algunos factores comunes en los cuales queremos poner mayor énfasis, ya que provocan la mayoría de estos problemas.

  • Factores psicológicos: Tal y como su nombre lo dice, este tipo de factor se relaciona con todos los aspectos psicológicos como: experiencias pasadas traumáticas durante la infancia o adolescencia, información sexual inadecuada, problemas en pareja, miedos o fobias, depresión, ansiedad entre muchos otros.
  • Factores orgánicos: Por otro lado, en este tipo de factor toma en cuenta todo lo que pueda causar una alteración en los mecanismos fisiológicos como podrían ser: enfermedades, fármacos, consumo de sustancias como: drogas, alcohol, tabaco, cigarro entre otros.

¿Por qué surgen las disfunciones sexuales?

¿Cómo afrontar una disfunción sexual?

En el siguiente punto, explicaremos cómo afrontar una disfunción sexual, tomando muy en cuenta el tipo o clase de la misma. Es importante destacar que el primer paso ante la presencia de un problema de este tipo es acudir a un especialista y seguir sus indicaciones.

Aversión al sexo

  • Ser comprensivo y empático con respecto a las causas o problemas que provocan dicha disfunción sexual.
  • Reducir la ansiedad, preocupación al momento de intimar como también todas aquellas conductas que evitan a toda costa que se lleve a cabo el acto sexual.
  • Fomentar la seguridad, comunicación y confianza en ti mismo y con tu pareja.
  • Analizar y graduar las conductar y situaciones que generen fobia o aversión.
  • Ir gradualmente exponiéndose a las situaciones o escenarios que menos angustia y fobia generan e ir paulatinamente adentrándose a aquellas que parecen más complicadas y temidas.
  • Llevar a cabo las relaciones sexuales de una manera menos exigente, así como también variar el lugar, las situaciones o tiempo en el cual se lleva a cabo el encuentro sexual.

Disfunción eréctil

  • Para este tipo de disfunciones primero debemos descartar la presencia de cualquier problema de salud, como diabetes, insuficiencia renal o alteraciones cardiovasculares, entre otros.
  • También es importante tener en cuenta si este problema se debe a alguna reacción de un fármaco o al consumo de sustancias como drogas, alcohol o tabaco, y si es así, seguir las indicaciones del especialista para reducirlas o eliminarlas.
  • Para concluir debemos tener en cuenta si algunas veces hay erecciones, pero en otras no, la presencia de determinadas creencias relativas a la masturbación, los juegos eróticos y la penetración.

Eyaculación precoz

  • Evaluar el tiempo exacto que tarda el individuo en eyacular una vez inicia la estimulación, número de empujes intravaginales, la rapidez, frecuencia y el ritmo en la estimulación sexual.
  • Un ejercicio muy común para esta disfunción sexual es el de aguantar o presionar con el dedo el pene, cuando se está a punto de eyacular, y repetir este proceso en reiteradas ocasiones hasta por fin eyacular.
  • Se debe tener en cuenta si este tipo de problema es psicológico, por consumo de un fármaco, drogas, irritantes prostáticos o alteraciones neurológicas.
  • Por último, debemos dejar a un lado el mito de que el tiempo de eyaculación promedio de los hombres es de 15 minutos, puesto que puede variar enormemente entre unos individuos y otros.

Trastornos orgásmicos masculinos

  • Tomar en cuenta si existe la presencia de eyaculación retardada (la persona eyacula después un largo tiempo) y aneyaculación (la persona no eyacula)
  • Evaluar si hay presencia de bebidas o alguna sustancia que pueda causar retraso del orgasmo, alteraciones hormonales, de salud, problemas psicológicos entre otros.
  • Un método práctico para esta disfunción es masturbarse individualmente, luego con la sola presencia de la pareja sin involucrarse y por último con la involucración de la pareja y caricias en los genitales se intentará lograr la eyaculación.

Tipos de disfunciones sexuales

Trastornos del orgasmo femenino

  • Evaluar si la disfunción orgásmica es primaria, secundaria, generalizada o situacional (examinar si el problema se presenta con una o todas las parejas de la mujer).
  • Descartar la presencia de fármacos, trastornos hormonales y de salud, problemas psicológicos entre otros.
  • Para este tipo de disfunción son muy recomendables los ejercicios de kegel.

Vaginismo y Dispareunia

  • Primero como con las otras disfunciones, debemos identificar si existen causas orgánicas que justifiquen el problema.
  • Luego descartar la presencia de patologías, alteraciones del himen, estenosis, inflamaciones de la vagina, tumores, alteraciones psicológicas entre otros.
  • Es importante mencionar que en este tipo de disfunción sexual, el examen físico con un especialista toma gran protagonismo y relevancia.

Deseo Sexual Hipoactivo Masculino y Femenino

  • Primero Clasificar la disfunción en primaria, secundaria, generalizada o situacional, así como medir el nivel de comunicación de la pareja. También es importante examinar si este problema se da con todas las parejas o solo con una.
  • Tomar en cuenta la frecuencia en pensamientos sexuales, fantasías eróticas, tensión en el área genital, lubricación y frecuencia con la que se quieren iniciar las relaciones sexuales.
  • Descartar problemas de pareja, disfunciones sexuales previas, episodios depresivos, trastornos hormonales, déficit de testosterona, déficit de medicamentos, enfermedades crónicas.

Trastorno de la excitación sexual de la mujer

  • Tomar en cuenta si existe una lubricación adecuada con la masturbación.
  • Incentivar la relación de pareja. De suma importancia verificar si el trastorno de excitación va junto al deseo sexual hipoactivo.
  • Descartar la presencia de alteraciones hormonales, menopausia, diabetes, vaginitis atrófica, alteraciones vasculares, fármacos entre otros.
  • Para finalizar, en esta disfunción sexual se recomiendan tanto los ejercicios de kegel como la autoestimulación (se puede usar un vibrador).

Las disfunciones sexuales pueden ser problemas que afecten tanto las relaciones como la autoestima de aquellos quienes la padecen. Por ello, en el caso de que sufras de una de ellas, debes acudir a tu médico y consultarlo con un terapeuta sexual

Escrito por

Marta Rodríguez Linkedin

Psicóloga nº colegiado: 616536659

Marta Rodrígues es psicóloga experta en coaching y en formación para el desarrollo personal. Además tiene formación y experiencia en la terapia cognitiva basada en el Mindfulness, así como en análisis funcional y en técnicas de modificación de la conducta. Su misión principal es ayudar a las personas a conseguir un mayor estado de bienestar.

Ver perfil

Bibliografía del artículo

  • Cabello, F. (2010). Manual de sexología y terapia sexual. Madrid: Editorial Síntesis.
  • Clay, R. A. (2009). What is female sexual dysfunction. Monitor on Psychology, 40(4). http://www.apa.org/monitor/2009/04/dysfunction
  • Crespi Asensio, E. (2017). Terapia sexual en pareja. Madrid: Editorial Síntesis.
  • Piatrangelo, A (2018). What Is Sexual Dysfunction? Healthline. https://www.healthline.com/health/what-sexual-dysfunction

Deja tu comentario