¿Cómo quitar una contractura muscular? 4 Soluciones y sus posibles causas

Una contractura muscular se trata de un dolor causado por el acortamiento y endurecimiento permanente de las fibras musculares de una zona concreta de nuestro cuerpo. Al tener una contractura, las personas tienen una menor flexibilidad en la zona, lo que acaba dificultando los movimientos. De esta forma, cuando alguien que tiene una contractura en la espalda o en otra parte del cuerpo, sentirá dolor al tratar de estirar este músculo, debido a que está demasiado contraído. Entonces, ¿Qué podemos hacer para quitar una contractura?

¿Qué es una contractura muscular?

Una contractura muscular es el resultado de tener demasiada rigidez en los tejidos conectivos, es decir, en aquellas zonas de nuestro cuerpo que sostienen otros tejidos y órganos de nuestro cuerpo. Por lo tanto, las personas podemos padecer de contracturas en los músculos, tendones, ligamentos y en la piel.

¿Cómo detectar si padecemos de una contractura?

Las personas que padecen de una contractura suelen sentir que sus movimientos se ven restringidos debidos a esta. Es por ello, que los principales síntomas cuando se padece de una es sentir que los músculos están muy rígidos y tensos en la zona afectada. En muchos casos, estas zonas tienen mucha resistencia al estiramiento, lo que causa un mayor dolor y una disminución del rango de movimiento.

¿Cuáles son las causas comunes de una contractura?

Cuando tenemos una contractura muscular, este está causado principalmente por el acortamiento permanente de las fibras musculares y el cambio de la estructura muscular normal. Una de las partes más implicadas a experimentar de una contractura, en la espalda o en cualquier músculo de nuestro cuerpo, son los sarcómeros, encargados de hacer que nuestros músculos se contraigan. Es precisamente el aumento de la longitud del sarcómero lo que impide que nuestros músculos se contraigan como normalmente lo hacen, provocando debilidad muscular en la zona afectada.

Por otro lado, las contracturas también pueden deberse a la disminución de las células satélite. Estas células están especializadas en reconstruir nuestros músculos, y además son necesarias para la regeneración y la reparación muscular. Normalmente, estos dos procesos ocurren debido a las siguientes causas:

1. Parálisis cerebral: Las contracturas a menudo están producidas por lesiones en las neuronas motoras superiores que impiden que las señales viajen desde nuestro cerebro hasta la médula espinal, donde las neuronas motoras controlan la contracción muscular. Cuando estas señales se debilitan, los músculos acaban volviéndose rígidos y débiles debido a la falta de estimulación.
2. Distrofia muscular: La distrofia muscular se trata de un grupo de trastornos neuromusculares hereditarios que se caracterizan por causar debilidad y desgaste muscular.
3. Falta de uso: Cuando los músculos de una zona no se usan durante mucho tiempo debido al reposo prolongado o a una mala postura, puede acabar apareciendo una contractura muscular. Esto suele ser muy común en la musculatura de la espalda debido a los hábitos sedentarios que tenemos en la actualidad. Como resultado, las personas pueden sentirse más débiles, así como padecer una mayor tensión y rigidez muscular.
4. Lesión: Las lesiones en los músculos pueden acabar causando contracturas. Esto es debido a que si se desarrolla más de lo normal el tejido cicatricial, es decir, aquel que une las fibras musculares y las articulaciones, se puede padecer una restricción significativa del movimiento.

Además de estas causas, existen otras condiciones que pueden acabar haciendo que las personas desarrollen una contractura. Aun así, estas son las razones más comunes.

¿Cómo quitar una contractura en la espalda o en otros músculos?

Es importante que si padecemos de una contractura en la espalda acudamos a un médico especialista. Algunos de los tratamientos más efectivos para acabar con las contracturas musculares son los siguientes:

• Fisioterapia: Acudir a un fisioterapeuta es uno de los tratamientos más comunes cuando se padece de un dolor muscular en la espalda debido a una contractura. La razón de ello es que estos especialistas te ayudarán a aumentar el rango de movimiento de una zona y a fortalecer los músculos. Para obtener resultados, es importante acudir a un fisioterapeuta de manera regular hasta que el dolor desaparezca.
• Uso de dispositivos: En algunos casos, se recomienda usar yeso o férulas para poder ayudar a estirar los tejidos de la donde se padece la contractura.
• Medicamentos: El médico puede recetar algunos medicamentos para reducir la inflamación y el dolor en la zona afectada.
• Cirugía: En los casos donde el dolor afecta más, la cirugía puede ser una buena solución. Esta cirugía estará enfocada a alargar los músculos y a reparar estos ligamentos o tendones.

¿Por qué es importante recibir un tratamiento ante una contractura muscular?

Muchas personas, ante el dolor causado por una contractura, pueden no acudir a un tratamiento debido a que sienten que pueden sobrellevarlo. Retrasar o no acceder a una solución puede acabar dificultando o imposibilitando que una persona recupere el movimiento de una zona. Por lo tanto, es importante intentar acudir a un especialista ante cualquier contractura muscular.