¿Cómo relajar la mandíbula si sufres de bruxismo? 5 Consejos y ejercicios para afrontarlo

Quiénes sufren de bruxismo suelen apretar y rechinar sus dientes de manera involuntaria. Normalmente, esta tensión en la mandíbula suele suceder cuando las personas que lo padecen están dormidas. Esta condición suele afectar a personas de cualquier edad, haciendo que desgasten los dientes, causando un dolor de mandíbula, cuello e incluso cabeza, así como causando otros problemas a largo plazo.

Aunque no existe una cura por completo para dejar de rechinar los dientes, el tratamiento puede reducir la frecuencia en la que sucede el bruxismo, disminuyendo también el impacto que puede tener y aliviando sus síntomas. Entonces, ¿qué ejercicios podemos hacer para relajar la mandíbula y evitar en bruxismo?

¿Cómo relajar la mandíbula?

Si sufres de bruxismo, existen una serie de consejos que puedes tener en cuenta para intentar detenerlo. En cada caso, algunos remedios funcionarán mejor que otros, por lo tanto, te recomendamos probar con algunas de las siguientes opciones:

1. Usa protectores bucales: Los protectores bucales protegen los dientes para evitar que rechinen mientras estás durmiendo. Estos protectores deben solicitarse en la consulta de un dentista.
2. Técnicas para reducir el estrés: Rechinar los dientes también puede estar relacionado con problemas de salud mental como puede ser el estrés o la ansiedad. Si crees que el bruxismo es un problema que se deriva de ello, puedes usar técnicas de reducción del estrés para intentar controlar sus síntomas. Por ejemplo, la meditación, practicar yoga, o simplemente realizar ejercicio de manera diaria te ayudará a combatir el bruxismo.
3. Evita los alimentos duros y pegajosos: Para relajar la mandíbula debes intentar evitar aquellos alimentos que son duros o pegajosos, como pueden ser las nueces, las palomitas de maíz o algunas frutas. Es aconsejable no comer este tipo de alimentos por la noche para intentar evitar el bruxismo.
4. No mastiques chicle: Masticar chicle puede hacer que tu bruxismo empeore durante la noche, por lo tanto, es recomendable sustituir el chicle por caramelos o simplemente dejar de tener esta costumbre.
5. Ajusta tu posición al dormir: La postura al dormir también puede influenciar a experimentar de bruxismo. Por ejemplo, tener mayor apoyo en la cabeza y el cuello te ayudará a aliviar la tensión en la zona.
6. Acude a un fisioterapeuta: La fisioterapia puede ayudarte a aprender a relajar la zona de mandíbula. Además, un fisioterapeuta podrá proporcionarte ejercicios específicos para afrontar el bruxismo.

Ejercicios para el bruxismo

Existen algunos ejercicios específicos que pueden ayudarte a reducir el dolor en la zona y a mejorar el rango de movimiento en la mandíbula.

Ejercicio 1:

• Cierra los labios suavemente mientras evitas que los dientes superiores e inferiores se toquen
• Presiona tu lengua contra el paladar sin que toque tus dientes
• Mantén esta posición todo el tiempo que puedas

Ejercicio 2:

• Pon tus manos en las articulaciones donde se conecta la mandíbula con la parte inferior.
• Abre lentamente la boca
• Mantén la boca abierta durante 5 a 10 segundos
• Cierra lentamente la boca

Realizalos al menos tres veces al día, haciendo al menos estos ejercicios durante diez minutos al día. Estos ejercicios para el bruxismo puede ayudarte a relajar y a estirar todos los músculos que están involucrados en rechinar los dientes.

¿Cómo puede afectarte el bruxismo si no lo tratas?

Si no tratas el bruxismo, esto puede provocar una serie de efectos secundarios, como pueden ser los siguientes:

• Dolores de cabeza
• Dolor en la mandíbula, cabeza y los oídos
• Desgaste y aplanamiento de los dientes
• Dientes sueltos que provocan dolor
• Dientes agrietados, dañados o fracturados
• Desgaste de empastes

En los casos más extremos, las personas con bruxismo pueden acabar presentando dificultades para hablar, masticar o incluso tragar. Rechinar los dientes se trata de una afección que puede tener muchas causas diferentes. Por lo tanto, tratarlo a tiempo es importante para evitar complicaciones dentales importantes. Ante los primeros síntomas, debes buscar un tratamiento que se amolde a ti.